Deliciosos Raviolis de Calabaza y Salvia con Salsa de Mantequilla Dorada: Receta Italiana Fácil y Gourmet

Raviolis de Calabaza y Salvia con Salsa de Mantequilla Dorada: Receta Italiana Fácil y Gourmet

Ah, los raviolis de calabaza y salvia. Este plato me evoca recuerdos de mi primer viaje a la región italiana de Emilia-Romagna, la cuna de la pasta fresca. Recuerdo que la combinación de la dulzura de la calabaza con el perfume terroso de la salvia me dejó completamente maravillado. Hoy quiero compartir esa maravilla contigo, llevando un pedacito de Italia a tu cocina. ¡Vamos allá!

Ingredientes:

  • Para la masa de ravioli:
    • 200 gr de harina «00»
    • 2 huevos grandes
    • 1 cucharada de aceite de oliva
    • Una pizca de sal
  • Para el relleno:
    • 300 gr de calabaza asada
    • 50 gr de queso ricotta
    • 50 gr de queso parmesano rallado
    • Unas hojas de salvia fresca
    • Sal y pimienta al gusto
  • Para la salsa:
    • 100 gr de mantequilla
    • Un puñado de hojas de salvia fresca
    • Opcional: unas gotas de jugo de limón para equilibrar

Instrucciones:

Preparar la masa:

  1. En un bol grande, haz un volcán con la harina y añade los huevos en el centro. Agrega el aceite de oliva y la sal.
  2. Con un tenedor, comienza a mezclar los huevos con la harina desde el centro hacia afuera, integrando los ingredientes poco a poco hasta formar una masa.
  3. Pasa la masa a una superficie enharinada y amasa durante unos 10 minutos hasta que esté suave y elástica. Cúbrela con un paño húmedo y deja reposar por 30 minutos.

Preparar el relleno:

  1. Tritura la calabaza asada junto con la ricotta y el parmesano hasta obtener una mezcla homogénea.
  2. Pica finamente las hojas de salvia y agrégalas a la mezcla. Sazona con sal y pimienta al gusto. Reserva.

Montar los raviolis:

  1. Divide la masa en dos partes y estira cada una con un rodillo hasta obtener un grosor de aproximadamente 1 mm. Si tienes una máquina para hacer pasta, este es el momento de usarla.
  2. Coloca pequeñas porciones del relleno sobre una de las láminas de masa, dejando espacio entre cada porción.
  3. Humedece ligeramente con agua alrededor del relleno y cubre con la otra lámina de masa. Presiona suavemente alrededor de cada porción de relleno para sellar los raviolis.
  4. Corta los raviolis con un cortador de pasta o un cuchillo afilado. Asegúrate de sellar bien los bordes para que no se abran al cocinarse.

Cocinar los raviolis y preparar la salsa:

  1. En una olla grande, lleva a ebullición abundante agua con sal. Cocina los raviolis por unos 3-4 minutos o hasta que floten.
  2. Mientras tanto, en una sartén grande, derrite la mantequilla a fuego medio hasta que comience a dorarse y adquiera un tono ligeramente marrón, desprendiendo un aroma a nuez.
  3. Agrega las hojas de salvia a la mantequilla dorada y cocina por 1-2 minutos más.
  4. Escurre los raviolis y añádelos a la sartén con la salsa. Mezcla suavemente para que se impregnen bien con la mantequilla dorada.

Presentación:

  • Sirve los raviolis de calabaza y salvia en platos individuales.
  • Rocía por encima un poco de la mantequilla dorada y decora con algunas hojas de salvia fresca.
  • Opcional: añade unas gotas de jugo de limón para darle un toque de acidez que balanceará perfectamente el plato.

Trucos para Cocinarlo Perfectamente:

  • Asegúrate de que la calabaza esté bien asada y caramelizada para potenciar su dulzura. Esto hará que el relleno sea aún más sabroso.
  • La clave para una masa de pasta excelente es amasar bien. No te saltes este paso, ya que garantiza una textura suave y elástica.
  • Cuando estés dorando la mantequilla, mantenla a fuego medio y vigílala constantemente para evitar que se queme. Queremos un tono dorado, no marrón oscuro.

Posibles Acompañamientos:

  • Una ensalada verde fresca con un toque de vinagreta ligera puede complementar perfectamente los sabores ricos y terrosos de los raviolis.
  • Panes artesanales como una focaccia de romero o una buena baguette pueden ser perfectos para mojar en la deliciosa salsa de mantequilla dorada.
  • Unas verduras asadas al horno, como espárragos o zanahorias, pueden añadir un contraste crujiente y colorido al plato.

Bebidas Recomendadas:

  • Un vino blanco seco, como un Pinot Grigio o un Sauvignon Blanc, puede equilibrar la dulzura de la calabaza y la riqueza de la mantequilla.
  • Si prefieres los vinos tintos, un Chianti ligero puede ser una opción interesante.
  • Para los amantes de la cerveza, una cerveza artesanal ligera o una lager también puede ser una buena pareja para estos raviolis.

Posibles Variaciones:

  • Raviolis de Espinacas y Ricotta: Sustituir la calabaza por espinacas cocidas y escurridas. La combinación de espinacas y ricotta es clásica y deliciosa.
  • Raviolis de Setas y Trufa: Utiliza una mezcla de setas salteadas y un toque de aceite de trufa para un relleno más sofisticado y aromático.
  • Raviolis de Queso de Cabra y Hierbas: Cambia el queso ricotta por queso de cabra fresco y añade una mezcla de hierbas frescas como tomillo, romero y orégano.

Sustitutos de Ingredientes:

  • Harina «00»: Si no tienes harina «00», puedes usar harina de trigo normal, aunque la textura puede variar ligeramente.
  • Calabaza: Puedes sustituir la calabaza por batata para una variación igualmente dulce y sabrosa.
  • Queso Ricotta: En caso de no disponer de ricotta, el queso cottage pasado por un tamiz puede ser un buen reemplazo.
  • Parmesano: El queso Grana Padano o incluso un buen queso manchego pueden ser sustitutos adecuados del parmesano.
  • Salvia: Si no tienes salvia fresca, puedes utilizar salvia seca, aunque en menor cantidad, o probar con otras hierbas aromáticas como el tomillo.

Consejos de Cocina:

Para estirar la masa de los raviolis, yo utilizo esta máquina para hacer pasta que siempre me garantiza un grosor perfecto y uniforme. Si estás buscando la comodidad de un estirado perfecto, te recomiendo esta herramienta que harás muy versátil en tu cocina.

¡Y ahí lo tienes! Un plato delicioso y lleno de sabor que transportará a cualquiera a las ricas tierras italianas. ¡Espero que disfrutes tanto preparándolo como saboreándolo!


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